Fabiana es una niña que despertó en mi algo que hace varios años olvidé.
De niña pensaba que yo podía comunicarme con mi caballo, había algo mucho mejor que las palabras.
Ahora que vi en esta pequeña, acercarse con tanto amor, parecieran entenderse. Recordé que sí fue especial, que sí sucedió, que en lo más profundo de mi ser, extraño a esa niña que hablaba con su caballo, porque no había nada de que preocuparse, ni posponer algo para ser feliz. Era una niña.